DECÁNTAME

Al lado de la plataforma (nuestra losa) donde estamos levantando la planta tenemos una balsa de decantación primaria para líquidos. Este invento sirve para, sencillamente, tirar agua sucia, para que por medio de procesos físicos (diferencia de densidad, peso ...) o químicos (inertización, oxidación, reducción ...) el agua que allí cae se libere de parte de su mierda.

Posteriormente se saca el agua que flota por encima de la capa de lodos y se lleva hasta una depuradora ... o lo que sea.

Ocurre, por tanto, que al ser un sitio donde se echa de todo, esto queda convertido en un sistema caótico de los que le gustan a Andrea, y cualquier variación en cualquiera de sus componentes, o la adicción de otros nuevos, es decir, cualquier cambio, trae unos efectos que resultan ser totalmente impredecibles.

Al no tener constancia exacta de lo que allí hay no sabemos como nos puede afectar su cambio, y para la semana que viene voy a hacer un trasvase de resinas catiónicas y aniónicas que son la base fundamental de la planta que construimos, y digo voy, porque he querido ser el encargado de hacerlo, liberando de algunas funciones al jefe de proyecto que anda bastante estresadillo el pobre, y por otro lado me garantizo tener alguna tarea extra, algo imprescindible en un trabajo.

Dichas resinas debo trasvasarlas mediante el emplo de agua desmineralizada que debe ser desaguada, lo cual, inevitablemente arrastra algo de material, que caerá en la balsa.

Introducimos por tanto un cambio que ya hemos dicho que traerá consecuencias impredecibles, por eso debo considerarlo un nuevo riesgo, como cualquier cambio, y deberé actuar según corresponde a alguien de mi categoría.

Y esto es todo, amigüitos y amigüitas, no olviden que El Autodiván enseña, El Autodiván entretiene, y yo les digo contento, hasta la entrada que viene ....

1 comentario:

Unknown dijo...

Pues sí que se aprenden cosas últimamente por aquí... ;)

Saludos!!