En la anterior entrega de esta apasionante serie ya hice referencia a mi preocupante estado de salud, asi que no insistiré en ello pese a que nuevamente algún tipo de virus, bacteria, germen ... ha llegado de visita (suputamadre).
La familia, esa gran desconocida, ha tenido una etapa cañera, a principio de año, una muy tranquila, coincidiendo con la llegada de los currelos, y una de intensa expectativa en este final de año tan .... ¿caótico?. Son conscientes de que debo hacer mi propia vida, también lo son de que las circunstancias no son las más propicias para ello, y por tanto hemos establecido tácitamente un pacto de no agresión, en el que ambas partes deben ceder un poco para enriquecimiento mútuo; pero ya me conozco esta situación y se que llegará el momento, cuando menos lo espere y menos defensas tenga, en que volverán al ataque, haciendo daño como sólo ellos saben.
Espero y confío en que llegado ese momento sepa, una vez más, que lo más beneficioso para mi será, como siempre, comer y callar. Mientras tanto he comenzado una negociación de Fin de Año, porque todo apunta que será la segunda vez que no lo pase con ellos, eso claro si este hijodeputa virus, bacteria, germen ... no tiene otros planes menos etílico-festivos.
Socialmente este año ha sido en líneas generales, fructífero, hay nuevas amistades, hay mejora de las antiguas y sobre todo sigue habiendo buen ambiente allá donde vaya, que es lo importante y por lo que siempre me he preocupado, aunque habrá quien no lo sepa ver así, cierto es que la moneda siempre tiene dos caras.
También me he llevado algún chasco, (¿quién no?), y sólo espero que la lección sea para aprender aunque a día de hoy no lo parezca.
En cuanto a la música, los festivales de este año no creo que hayan estado a la altura de los anteriores, y ¡ojo! que es sólo mi criterio (insisto en las dos caras de la moneda), pero me lo he pasado muy bien en ellos, siempre, incluso en el mío, no en vano a gran parte de ellos he tenido la mejor compañía posible y si esta fallaba por la razón que fuera había otras compañías que, aunque de otra manera, conseguían hacer lo mismo, es decir, pasar un buen rato.
Me quedo con este final de año, con tres discos que acaban de salir, recién paridos,
Vallarna,
Aura Kuby y
Naheba, cada cual en su propio estilo pero mucho más que interesantes y que me llevan a pensar que la música sigue viva y creciendo (en la tierruca sobre todo), y que no se me olvide hacer una mención muy especial hacia
Braña, por la confianza depositada hacia este perpetrador de bodhran.
Uno de los mayores descubrimientos que he hecho este año ha sido el placer de la lectura en los bares a los que voy, con la compañía de mi libru de turno, porque no siempre es interesante ni fructífera la conversación propia de estos lugares ...
La
Asociación PRAU ha confiado en mi para formar parte de ella con lo que mi curriculum en esto del folk ha crecido un poco más, a ver si ahora eso del
Myspace toma nota de ello jejeje.
Y yo creo que hasta aquí la sección esta ya ha dado mucho de si, intuía que iba a ser ni frio ni calor y lo he adornado de un bonito batiburrillo; normalmente estos van al final pero lo que son las cosas, el blog sigue siendo mío y le doy el orden que quiero ..... y si no dejo de respirar para fastidiaros a todos jejejeje.
Lo mejor, por supuesto, para el final.
