Soy agnóstico, lo he dicho varias veces, creo en dios pero no creo en la religión, en ninguna, y por cercanía debo decir que de la que más huyo es la cristiana-católica, aquella que de pequeño me "enseñaron" y de la cual, años después, con la mente despierta y abierta, renegué y reniego por no estar de acuerdo en la manera de actuar frente a una base ideológica. Pero no he querido hacerlo de una manera excluyente, toda vez que elegí el "vive y deja vivir", sin meterme en las creencias de los demás y sin dejar que otros se metieran en las mías.
Es por ello que a raiz de las declaraciones ayer del papa "Peneadicto 16", en las que arremetía a saco contra ateos y agnósticos (LEER), me he cabreado, y, por tanto, si él declara la guerra no seré yo quien la rehuya toda vez que no quiero que un personaje que de nada me conoce se permita hablar de mi, si, de mi, incluyéndome en una generalidad, y por tanto, con ánimo de zanjar un debate que no quiero abrir, sólo puedo decir una cosa:
¡¡¡QUE TE JODAN, CABRÓN!!!
2 comentarios:
Los dos primeros párrafos los podría haber escrito yo (si tuviera labia), pero creo que el tercero te retrata de manera distinta, y no tiene nada que ver con el "vive y deja vivir" con el que te defines primero, y sí más con el insulto y desprecio.
Creo que no es conveniente llamar cabrón a nadie si lo que se persigue es la tolerancia.
Saludos desde la Pozona.
Como bien digo, aparte del "vive y deja vivir", no permito que nadie se entrometa en mis asuntos de fe, si recurro al insulto y al desprecio es porque estoy seguro que así lo llegará a entender, poniendome a un nivel de bajeza terrenal que cualquiera, incluso los que están a la derecha de (su) dios pueda comprender.
Y también lo que persigo es cierto grado de autoprotección contra ese poder que poco entiende de tolerancia, y a sus siglos de "protección" me refiero.
Saludos, vecino.
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