DE EMPATÍAS Y OTRAS HIERBAS

Lo que son las cosas, en uno de los exámenes, el de Seguridad e Higiene, del cual había salido muy decepcionado ha resultado que tengo un 6,8 una nota estupenda y que me ha roto un poco los esquemas prefijados, mi cara de asombro ha sido un verdadero poema y de ello se han percatado los compañeros, estos ojitos a punto de salirse de sus órbitas y las cejas traspasando el craneo servían de testigos de mi acongojamiento.

Pero algo ha cambiado, lejos de haberme alegrado como debería ser me siento apenado por la nota obtenida por ciertos compañeros, en concreto tres que han suspendido, y no pongo nombres pues se que empiezan a leerme, un buen guionista mantiene el "suspense" hasta el final :-)

Pues eso, que creo que la tan olvidada empatía y el antiguo compañerismo que me acompañó durante buena parte de mi vida parecen haber despertado de su letargo de años (la mayoría de estos coincidiendo con el nuevo milenio en el que casi llegué a perder mi fé en el genero humano), es una buena señal de lo bien que me siento conmigo por haber tomado la decisión de reciclar mi vida, pero al mismo tiempo debo saber domar estos sentimientos, son buenos pero no deben dominarme, al contrario debo ser yo quien los controle o vuelvo a perder el rumbo.

Definitivamente soy dueño de mi tiempo y esta es la mejor noticia de este año, se acerca un post introspectivo semejante al del año pasado.

Que disfruteis del puente y yo me quedo mitad de juerga y mitad de estudio, tengo que presentar un trabajo el miércoles y empezar a preparar el último examen de este trimestre.