(James Brown In Memorian)
Bueno, que nadie se ponga nervioso, regresé vivo y coleando, los diferentes aviones que tuve que coger para cumplir con el rito navideño no tuvieron más problemas que el hecho de que está prohibido conectar los mp3 en vuelo, algo que no llego a entender así que si hay algún Ingeniero Teleco o Electrónico entre el público y que tenga a bien ilustrarme le estaría eternamente agradecido.
Las fiestas bien, mucho, rico y variado papeo; multitud de caldos de diversos orígenes y sabores; sol y calor por aquello de encontrarnos en el sur ... la chiquilla, pues bien, un poco escandalosa pero está en la edad de saber dar el coñazo; la cosa es que la amenaza de mi padre de no repetir el año que viene es una espada de Damocles sobre la cabeza de Lara.
Estos días he tenido mucho tiempo muerto para pensar en mis cosas, no en esas chorradas sobre salvar vidas o extremidades de los trabajadores que será mi cometido (con un mínimo de suerte) dentro de breves meses, he decidido lanzarme pero con pies de barro que a esta edad mía las ostias son bastante dolorosas y que se suelden los huesos lleva más tiempo que cuando era un veinteañero. De estos días, que he podido leer mi correo "mu malamente" en el ordenador de mi hermano, me quedo con esta frase: Estando siempre dispuestos a ser felices, es inevitable no serlo alguna vez. (Blaise Pascal).
No quiero que mi vida siga siendo una especie de aeropuerto en el que los viajeros coincidan apenas quince minutos de su vida, me gusta más la sensación de un crucero de vacaciones donde comparten algo más de tiempo que esos minutos, y de manera más intensa. ¡Coño! que propósito más bueno para el año que viene :-)
Ayer, nada más llegar de Madrid en el último transbordo salí pitando para el Naroba porque el mono de sesión era insoportable y vaya si me sacié, basta decir que la última canción fue un mano a mano entre P. y yo de cinco reels, en el que acabé con el brazo casi en cabestrillo, pero mereció la pena, llevaba muchas semanas deseando tocar de manera salvaje y se cumplió ... (mensaje subliminal).
Y nada más por el momento, voy a dejar que despida este post mi sobrina, que la tengo aquí pegada al monitor a modo de lectora de lujo, así que Lara, escribe algo:
Bueno, que nadie se ponga nervioso, regresé vivo y coleando, los diferentes aviones que tuve que coger para cumplir con el rito navideño no tuvieron más problemas que el hecho de que está prohibido conectar los mp3 en vuelo, algo que no llego a entender así que si hay algún Ingeniero Teleco o Electrónico entre el público y que tenga a bien ilustrarme le estaría eternamente agradecido.
Las fiestas bien, mucho, rico y variado papeo; multitud de caldos de diversos orígenes y sabores; sol y calor por aquello de encontrarnos en el sur ... la chiquilla, pues bien, un poco escandalosa pero está en la edad de saber dar el coñazo; la cosa es que la amenaza de mi padre de no repetir el año que viene es una espada de Damocles sobre la cabeza de Lara.
Estos días he tenido mucho tiempo muerto para pensar en mis cosas, no en esas chorradas sobre salvar vidas o extremidades de los trabajadores que será mi cometido (con un mínimo de suerte) dentro de breves meses, he decidido lanzarme pero con pies de barro que a esta edad mía las ostias son bastante dolorosas y que se suelden los huesos lleva más tiempo que cuando era un veinteañero. De estos días, que he podido leer mi correo "mu malamente" en el ordenador de mi hermano, me quedo con esta frase: Estando siempre dispuestos a ser felices, es inevitable no serlo alguna vez. (Blaise Pascal).
No quiero que mi vida siga siendo una especie de aeropuerto en el que los viajeros coincidan apenas quince minutos de su vida, me gusta más la sensación de un crucero de vacaciones donde comparten algo más de tiempo que esos minutos, y de manera más intensa. ¡Coño! que propósito más bueno para el año que viene :-)
Ayer, nada más llegar de Madrid en el último transbordo salí pitando para el Naroba porque el mono de sesión era insoportable y vaya si me sacié, basta decir que la última canción fue un mano a mano entre P. y yo de cinco reels, en el que acabé con el brazo casi en cabestrillo, pero mereció la pena, llevaba muchas semanas deseando tocar de manera salvaje y se cumplió ... (mensaje subliminal).
Y nada más por el momento, voy a dejar que despida este post mi sobrina, que la tengo aquí pegada al monitor a modo de lectora de lujo, así que Lara, escribe algo:
Hola soy Lara.
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