Seguro que al bueno de Arturo no le importa que le plagie descaradamente (y sin ruborizarme) el nombre de su espacio en la red como título para esta entradita; aunque claro, puede que ahora mismo lo único que pretenda es arrancarme la cabeza de cuajo por tal osadía, así que dejaré que se exprese en los comentarios no es vano es uno de los mejores lectores que tengo y con el cual no puedo tener secretos jejeje.
Ha sido un fin de semana intenso en tierras astures, otro más, y esta vez ha traido a mi mente recuerdos de hace unos cuantos años cuando este humilde "escribiente" viajaba allá donde estaba el cotarro del asunto folki y nunca me faltaba un sitiuco donde descansar o al menos reciclarme momentaneamente. El hecho de que este buen personaje castellano nos haya abierto de par en parlaspuertas de su casa y sobre todo de su cocina ha sido el ingrediente necesario para recordar lo que significó para mi eso del folk, hacer amigos y compartir con ellos música, risas, bebidas espirituosas y manjares gastronómicos de mil y un lugares.
Si llegas a un sitio y de repente te dicen: "toma, estas son tus llaves para cuando quieras pirarte", lo más lógico es que en ese momento te sientas como en tu propia casa, amen de la hospitalidad recibida para paliar los desagradables efectos de los primeros embates del frío que ha llegado.
Si, gracias a Arturo y su arturismo puedo volver a decir, orgulloso, que mi rollo es el folk, pero concebido como lo que ya he dicho: buen ambiente y buen rollo ...
Una vez más me siento en la obligación de planear cómo coño adquirir mi propio lugar con el que, algún día, empezar a corresponder a tanta amabilidad ... es cuestión de que me salga el currelo y empezar a mirar posibilidades, es decir, cuestión de un poquito más de paciencia.
Porque también se trata de corresponder a la hacedora del asado de trucha del sábado, demostrando una vez sus increibles dotes culinarias ... y a tantos otros que en algún momento de mi (miserable) existencia protofolki han tenido a bien darme muestras de amistad y cariño ...
Y debo dejarlo ya que esta entrada que se suponía iba a ser para dar las gracias se está convirtiendo en algo muy parecido a un programa de testimonios sensibleros y no quisiera ser yo el causante de la aparición de lágrimas de emoción.
Dejemoslo pues simplemente en una sincera y gran gratitud hacia Arturo.
Ha sido un fin de semana intenso en tierras astures, otro más, y esta vez ha traido a mi mente recuerdos de hace unos cuantos años cuando este humilde "escribiente" viajaba allá donde estaba el cotarro del asunto folki y nunca me faltaba un sitiuco donde descansar o al menos reciclarme momentaneamente. El hecho de que este buen personaje castellano nos haya abierto de par en parlaspuertas de su casa y sobre todo de su cocina ha sido el ingrediente necesario para recordar lo que significó para mi eso del folk, hacer amigos y compartir con ellos música, risas, bebidas espirituosas y manjares gastronómicos de mil y un lugares.
Si llegas a un sitio y de repente te dicen: "toma, estas son tus llaves para cuando quieras pirarte", lo más lógico es que en ese momento te sientas como en tu propia casa, amen de la hospitalidad recibida para paliar los desagradables efectos de los primeros embates del frío que ha llegado.
Si, gracias a Arturo y su arturismo puedo volver a decir, orgulloso, que mi rollo es el folk, pero concebido como lo que ya he dicho: buen ambiente y buen rollo ...
Una vez más me siento en la obligación de planear cómo coño adquirir mi propio lugar con el que, algún día, empezar a corresponder a tanta amabilidad ... es cuestión de que me salga el currelo y empezar a mirar posibilidades, es decir, cuestión de un poquito más de paciencia.
Porque también se trata de corresponder a la hacedora del asado de trucha del sábado, demostrando una vez sus increibles dotes culinarias ... y a tantos otros que en algún momento de mi (miserable) existencia protofolki han tenido a bien darme muestras de amistad y cariño ...
Y debo dejarlo ya que esta entrada que se suponía iba a ser para dar las gracias se está convirtiendo en algo muy parecido a un programa de testimonios sensibleros y no quisiera ser yo el causante de la aparición de lágrimas de emoción.
Dejemoslo pues simplemente en una sincera y gran gratitud hacia Arturo.
3 comentarios:
¡Serás capullo! Has conseguido que se me salten las lágrimas. La verdad es que ha sido un fin de semana para recordar precisamente por vuestra visita y, especialmente, por esa tarde que pasamos en la cocina conversando, escuchando primicias discográficas, desayunando, comiendo, fumando y recibiendo unas clases de bodrán. Espero más visitas vuestras y por supuesto alguna foto para poder actualizar mi fotolog. A ser posible que salgamos los tres. Una pena que no tengamos una foto en la cocina.
Juerti abrazu!
Tsssssss, calla, calla, no lo digas muy alto (lo de las novedades discográficas) que el Gran Hermano nos vigila .... hey, Rafa, no hicimos nada, de verdad, todo fue un sueño, la pastilla roja de Matrix y demás jajajajajaja.
Las fotos van en breves minutos, aunque me temo que los tres que salimos no somos los tres que estuvimos en la cocina, queda pendiente para próximas reuniones.
Juerti, juerti, ñeru!!
Desde aquí te agradezco igualmente tu hospitalidad Arturo, fuiste muy amable. La verdad que hacía tiempo no pasaba tan buen rato tocando, cuchando música, comiendo a las mil y charrando. Me temo que ando en la misma situación que Merlín, ojalá y pronto podamos devolver tanto buen acogimiento, en mi caso compartir piso no es el lugar más idóneo, aun así para cualquier cosa tened en cuenta un cachito de piso en Gijón.
Y gracias por llevarnos al Cuevanu! nos encantó el lugar y el camarero muy majo! Un saludín!
fdo: la del asado de trucha
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