Estoy, por si no os habíais dado cuenta ya, en un período de fertilidad escritora increible, y me encanta y lo aprovecho para dar rienda suelta a lo que bulle por mi sesera. En otras ocasiones me he encontrado en el lado opuesto y hacía todo lo posible para darme una vuelta de vez en cuando por este rinconuco blogueril. Alguna vez he leido por ahí que la necesidad agudiza el ingenio, y teniendo en cuenta que ultimamente tengo el ingenio de un crecido insuperable es de lógica que tenga alguna necesidad por cubrir.
Podría empezar a hablar del hedonismo, pero intuyo que los tiros no van por ahí precisamente, aunque también es cierto que a nadie le amarga disfrutar del placer por el placer; creo que no van los tiros por ese camino porque siendo de la opinión de que necesito alguna actividad que entrañe cierto grado de responsabilidad se entiende que esto es incompatible con el hedonismo absoluto, por tanto desecho esta idea.
Y por continuidad con lo anterior, en justa correspondencia con ello, como ya habreis adivinado, lo que necesito para cubrir esa necesidad (toma redundancia) es encontrar un trabajo, así de claro.
Pero, entonces ¿qué hay del Gran Proyecto?. Muy sencillo, mientras llega el "triste" momento de la mudanza y despedida he estado proyectando cómo me voy a desenvolver allá arriba. Seguro que no encuentro El Curro en cuanto llegue, pero ¿hasta que punto cogería lo primero que encontrara o encontrase?.
Necesitaré trabajar, lógico y normal, porque allí no tendré a mis padres para sacarme las castañas del fuego, pero tampoco quiero volver a pecar de lo mismo que hice aquí en su momento, coger lo que haya sin más. Si hiciera eso a buen seguro que mis posibilidades de permanencia serían mínimas, me quemaría muy rápido y volvería con las orejas gachas en tiempo record. No, no quiero eso, para ello no me complico la vida y me quedo aquí, siempre me quedará volver a los almacenes por mucho que tenga la espalda destrozada "ad perpetuum".
Asi que, así están las cosas, tengo y siento la necesidad de trabajar otra vez, al mismo tiempo tengo y siento la necesidad de irme de "papi's house", a su vez tengo y siento la necesidad de largarme de Santander y Cantabria ... pero una vez cubiertas todas estas necesidades, allá en Tremp ... ¿qué ocurrirá?. Ni idea compañeros del metal, pero aquí radica la magia de lo desconocido, puede ser algo tan sorprendente (optimismo moderado on) que cubra de una vez y por todas las necesidades laborales y vitales.
Será entonces cuando deba buscar la inspiración y el ingenio en otra parte, porque, siempre me quedarán las noticias del día :-)
Podría empezar a hablar del hedonismo, pero intuyo que los tiros no van por ahí precisamente, aunque también es cierto que a nadie le amarga disfrutar del placer por el placer; creo que no van los tiros por ese camino porque siendo de la opinión de que necesito alguna actividad que entrañe cierto grado de responsabilidad se entiende que esto es incompatible con el hedonismo absoluto, por tanto desecho esta idea.
Y por continuidad con lo anterior, en justa correspondencia con ello, como ya habreis adivinado, lo que necesito para cubrir esa necesidad (toma redundancia) es encontrar un trabajo, así de claro.
Pero, entonces ¿qué hay del Gran Proyecto?. Muy sencillo, mientras llega el "triste" momento de la mudanza y despedida he estado proyectando cómo me voy a desenvolver allá arriba. Seguro que no encuentro El Curro en cuanto llegue, pero ¿hasta que punto cogería lo primero que encontrara o encontrase?.
Necesitaré trabajar, lógico y normal, porque allí no tendré a mis padres para sacarme las castañas del fuego, pero tampoco quiero volver a pecar de lo mismo que hice aquí en su momento, coger lo que haya sin más. Si hiciera eso a buen seguro que mis posibilidades de permanencia serían mínimas, me quemaría muy rápido y volvería con las orejas gachas en tiempo record. No, no quiero eso, para ello no me complico la vida y me quedo aquí, siempre me quedará volver a los almacenes por mucho que tenga la espalda destrozada "ad perpetuum".
Asi que, así están las cosas, tengo y siento la necesidad de trabajar otra vez, al mismo tiempo tengo y siento la necesidad de irme de "papi's house", a su vez tengo y siento la necesidad de largarme de Santander y Cantabria ... pero una vez cubiertas todas estas necesidades, allá en Tremp ... ¿qué ocurrirá?. Ni idea compañeros del metal, pero aquí radica la magia de lo desconocido, puede ser algo tan sorprendente (optimismo moderado on) que cubra de una vez y por todas las necesidades laborales y vitales.
Será entonces cuando deba buscar la inspiración y el ingenio en otra parte, porque, siempre me quedarán las noticias del día :-)
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